Esta es una funda útil e indispensable, no es la gran cosa en realidad, es algo mejor que una funda que simplemente te cubre del polvo pero no te va a proteger una caída ni de coña.
Es muy cómoda para transportar el instrumento debido a sus asas para ponerlo a modo de mochila, aunque he de decir que quizás por mi altura, es algo incómodo llevarlo así, pero eso es una apreción personal.
A día de hoy, después de un año, la funda sigue bastante guay, sin ninguna rotura ni nada así, pero yo en lo personal para instrumentos que valoremos por cariño o su precio, barajaría la opción de un estuche que lo proteja mejor, pero sin duda es una funda recomendable.
Por último, mencionar que el amplio bolsillo que tiene es muy útil para guardar las cuerdas, el afinador, el cable, las púas... y lo que puedas meter porque es bastante amplio.